El componente más antiguo del cerebro — su base — está presente en un abanico de especies, desde los humanos hasta los gecos. Este nivel controla funciones reguladoras automáticas. Si la temperatura corporal desciende, esta parte del cerebro responde ordenando a los músculos que tiriten. Si los niveles de glucosa en sangre descienden, también se detecta aquí, lo que desencadena la sensación de hambre. Si una persona sufre una lesión, otro centro neuronal en este nivel inicia una respuesta al estrés.